La técnica de impresión DTF, cuyas siglas en inglés significan Direct Transfer to Film, consiste en imprimir un diseño sobre un film especial que luego se transfiere directamente a la tela u otros materiales mediante calor. Tal como indica su nombre, la imagen pasa del film al tejido de forma directa, logrando un acabado de alta calidad.

Una de las ventajas más valoradas por el público es la libertad que ofrece en cuanto al tipo de tejido, ya que permite estampar sobre algodón, poliéster o mezclas de fibras sintéticas sin perder definición ni durabilidad. Esta versatilidad, unida a la viveza de los colores y la resistencia al lavado, la está convirtiendo en una de las técnicas más populares del momento.